Existen diferentes maneras de podar las plantas entre las que podemos encontrar; Poda apical, poda fim, RIB, poda de bajos, etc entre estos tipos de poda también podemos incorporar otras técnicas como el supercropping o rotura parcial del tallo o ramas para redirigir y guiar mejor nuestras plantas.
Antes de empezar a realizar las podas a las plantas debemos saber que tipo de plantas queremos cultivar, dependiendo de su tamaño; pequeño, mediano o grande deberemos tener en cuenta el espacio del cual disponemos junto con las limitaciones externas al cultivo que se nos puedan presentar tanto en el cultivo de interior como en el de exterior.
En el cultivo de exterior deberemos tener en cuenta varios factores que podrán ayudarnos a escoger entre las diferentes técnicas de control de altura que procederemos a exponer.
¿Qué exposición solar recibirán nuestras plantas de cannabis?
Es posible que en las terrazas y jardines las horas de sol cambien mucho según época del año, de modo que deberemos controlar el número de horas de sol hay en cada periodo del año en el que cultivamos para adecuarnos mejor al tipo de cultivo o poda a realizar. Cabe destacar que en aquellos países que se encuentren cerca de los trópicos las condiciones ambientales suelen ser bastante diferentes, así que también deberemos tener en cuenta la latitud en el cultivo de cannabis de nuestra zona geográfica.
Este factor es importante porque si tenemos pocas horas de sol durante la primavera/verano y estas aumentan a medida avanza el verano/otoño podremos tener unas plantas de un tamaño medio pero con una gran producción de gran calidad. Cabe decir que cuantas más horas de sol directo tengan las plantas mejor más grandes, compactos y sabrosos quedarán los cogollos.
Poda apical en el cannabis
La poda apical es un antiguo sistema muy utilizado tanto en interior como en exterior, que consiste en el corte de la parte superior de la planta. De esta manera conseguimos parar el crecimiento de la planta, forzándola a producir más brazos. A cada corte que le realicemos le crecerán 2 brazos en forma de Y, que pasarán a ser ambos ramas centrales de la planta.
Si queremos hacer la poda apical deberemos esperar por lo menos a que desarrollen 3 nudos, A partir de ese momento resistirá todas las podas que queramos o podamos hacerle. Deberemos cortar a ras por encima del 3er nudo, dejando 3 pares de ramas. Justo encima de los últimos 2 brazos, nos crecerán 2 más abiertos, dándole a la planta forma de Y.
En exterior es una opción a tener en cuenta si no queremos que nuestra plantación llame la atención, ya que conseguiremos que no se nos formen árboles demasiado grandes. Al realizarle la poda, empezará a dar largos brazos, por lo que obtendremos plantas bajitas y con una gran cantidad de brazos. Si realizamos una poda pararemos totalmente el crecimiento de la planta, por lo que deberemos realizar todas las que podamos, para conseguir una cantidad mucho mayor de brazos. Teniendo cuidado de no hacerlo cuando falten menos de 3 semanas para iniciar la floración. Cada vez que cortamos una punta brotarán brazos nuevos, Como resultado nos quedará una planta pequeña y redonda, pero muy ancha y ramificada.
Poda FIM “Fuck, I Missed”
HISTORIA: No existe un origen exacto de cómo surgió esta técnica ya que surgió luego de un error por parte de un cultivador en los Estados Unidos, Este se encontraba realizando una poda a sus plantas a finales de los noventa y cometió un error podando de más, las palabras que exclamo en ingles fueron “Fuck, I Missed”, lo que su traducción al español significa “joder la cague”. Las iniciales de estas palabras en inglés darían lugar a lo que se conoce hoy como Poda FIM, sobre todo por el hecho de que el cultivador encontró una forma de mejorar la poda apical en las plantas de marihuana. Poco después el cultivador se dio cuenta de que en realidad no se le había ido la mano podando sino que encontró una nueva manera de mejorar la poda apical típica, lo cual fue un gran avance teniendo en cuenta que esta última era la más avanzada hasta ese momento. Pero, ¿cómo es posible? Hoy en día lo vemos como algo muy fácil de comprender, la explicación se debe en que en la yema apical se concentran un gran número de nudos por centímetro. La apical es un capullo, Que está protegido por un par hojas que si apartamos veremos otro par de hojas y si las volvemos a apartar veremos las siguientes, estas hojas salen de un nudo que a medida que la planta va creciendo los internudos (ramas) se van estirando. Así que si esta apical la cortamos por el sitio exacto y debido a que la concentración de nudos es enorme, podremos tener suerte y forzar la ramificación, sería como hacer una apical sobre un brote con muchísimos nudos en lugar de dos, y creciendo todas con el mismo vigor. realizando varias pruebas, Se consiguió optimizar la técnica de tal modo que casi siempre se aseguraba un mínimo de 7 ramas. Cortando un 70% de la apical comprobó que se obtienen los mejores resultados, llegando a conseguir hasta 10,11,12 o más ramas. El inconveniente es que cortar exactamente el 70% de la apical es complicado y no siempre nos sale el mejor corte, en ocasiones cortando un poco más o un poco menos sale mejor. Lo importante a fin de cuentas es el mínimo de 5 ramas que conseguiremos y que irán creciendo todas a la misma velocidad.
Poda RIB
Esta poda surge como tantas otras de manera accidental. Casi todos los cultivadores de interior habrán sufrido alguna vez cultivando plantas difíciles de cultivar por su gran estiramiento en floración. Y a quien más y a quien menos, alguna vez se le habrá quemado algún cogollo por su cercanía con la lámpara en el caso del cultivo en interior. Es aquí cuando nos damos cuenta que estos cogollos quemados experimentan una refloración. Es decir, se produce un incremento masivo de flores a partir de un cogollo quemado.
En este caso se aprovecha un momento de cambio metabólico de la planta, con la consiguiente concentración de células madre en las zonas sensibles o en este caso dañadas. Pero existe una gran diferencia, ya que en la poda RIB al al estar la planta ya en floración, con todos los niveles hormonales disparados, la planta se centra en la fabricación de órganos sexuales, es decir, en cálices y flores. Además se ve potenciado ya que al realizar esta poda también se eliminan pequeñas hojas que crecen entre los cálices. Cuando la floración se vuelve a estabilizar, las señales hormonales indican a la planta el comienzo de la senectud, por lo que sólo se producirán flores a partir de ese momento y la ausencia de hojas es total.
En primer lugar, algo importante a la hora de realizar esta técnica es la variedad que se cultiva. Es importante conocer las características de la planta, pues en ellos estará el éxito o el fracaso. Lo ideal son híbridos índica/sativa 50/50, los que poseen un período de floración suficientemente largo para que los resultados sean los que se buscan. Lo ideal, son plantas con una floración de unos 60-70 días. Esta técnica RIB se debe realizar en mitad de floración. En variedades de 75 días de floración, aproximadamente la haremos en los días 35-40. En variedades de 90 días de floración, aproximadamente en los días 43-47. Siempre se debe dejar el suficiente tiempo para que el resultado, como decimos, sea el mejor. Y el modo de hacerla es muy simple, con un mechero con buena llama, o un algodón con un poco de alcohol, iremos quemando superficialmente las puntas de los cogollos, llegando a quemar además de los pistilos o pelillos blancos, las zonas verdes, incluidas las hojas cercanas. Siempre con cuidado de no pasarse.
La poda baja
Cortar las ramas bajas y/o secundarias que no reciben tanta luz nos sirve para estimular el crecimiento medio y alto de la planta. De esta manera la energía se concentra en las ramas que han quedado. Con la poda baja sucede la generación de nuestros futuros cogollos grandes, Y pesadados.
Al no recibir tanta luz las ramas bajas crecerán chicas, débiles. Y sus flores serán muy pequeñas. Son esas florcillas que generalmente se terminan descartando en grandes cosechas. Pero que también pueden ser aprovechadas. Hay cultivadores que prefieren no realizar podas bajas. Ya que con esos pequeños frutos hacen comidas, tinturas, aceites, y/o cremas medicinales. Otros en cambio, quizás más fundamentalistas, no tocan la planta porque prefieren que la energía fluya en su totalidad por la planta de marihuana intacta. Con está poda Puedes tener un mejor control visual de las plagas. Al retirar las ramas bajas puedes ver el tallo completamente y así reconocer fácilmente algún individuo extraño que ande merodeando o intentando subirse al espécimen. Y así actuar. Sea manualmente o con anti plagas orgánicos y naturales. Espolvorear el suelo con tierra de diatomeas es una muy buena opción para el control de plagas que se originan en los suelos. Muchas de las plagas se generan en la parte baja de la mata. Es decir, salen del sustrato. O llegan caminando directamente. Incluso se arrastran a través del suelo para trepar y colonizar nuestra planta. Si mantienes toda esa zona bajo control, es decir limpia, puedes prevenir cualquier tipo de invasión de manera más eficaz con la poda.
Es todo por ahora mi gente, Buenas vibras, Espero les haya sido de utilidad CCC2020.